Un nuevo llamado le hizo Alba Lucía Reyes, madre de Sergio Urrego, al MInisterio de Educación y a la Secretaría de Educación de Cundinamarca para que se emita una sanción ejemplar en contra del Colegio Gimnasio Campestre por los actos de discriminación que se adelantaron en contra del joven de 16 años por su condición sexual.

Esta sanción, explicó, debe ser ejemplarizante para las otros centros e instituciones educativas del país, sobre todo aquellas que ejercen presión en contra de sus estudiantes por sus tendencias e ideologías. Para Reyes el Gobierno debe actuar para ponerle un punto final a este tipo de persecución.

“El Gimnasio Castillo Campestre sigue abierto, sigue matriculando, sigue vulnerando los derechos de los niños y sus familias”, precisó la madre del joven de 16 años en diálogo con RCN Radio. Hasta el momento, explicó, las directivas de la Institución no han presentado excusas o una muestra de perdón por los actos de discriminación que ejercieron contra Sergio.

Ante esto espero que las autoridades cierren dicho centro educativo ubicado en el municipio de Tenjo, Cundinamarca, con el fin de que no se sigan registrando estos actos por parte de las directivas en contra del estudiantado. “Fue un caso de matoneo y persecución”, explicó la madre del joven quien se quitó la vida el pasado 4 de agosto.

Finalmente aseguró que confía en la justicia colombiana para que se emitan las sanciones penales en contra de la exrectora del Colegio, Amanda Azucena Castillo y la psicóloga de la Institución, Ivonne Andrea Cheque quienes tendrán que responder por los delitos de acto de discriminación, inducción o ayuda al suicidio y falsa denuncia contra persona determinada.

Para la familia del joven las directivas del Colegio deben reparar el daño causado al bueno nombre, honra y memoria del joven.